A sirenita e Victoria Plum.

"Sólo si un humano te amara de tal modo que llegaras a ser para él más importante que su padre o su madre; si todo su amor y todos sus pensamientos se derramaran sobre tí y el sacerdote pusiera su mano derecha sobre la tuya e hicierais un juramento de fidelidad por los siglos de los siglos, sólo entonces entraría en tu cuerpo un alma y podrías gozar de la felicidad del ser humano".
           La sirenita de Hans Chistian Andersen. Ed Cátedra.

Pois sí, levo todo o día pensando nas princesas Disney  gracias a esta composición que atopei no facebook, a través da páxina de Gogara.

Pregúntome en qué medida estas princesas de conto, interpretadas ou inventadas por Disney, tiveron algo, muito ou pouco que ver coa miña socialización.

As princesas Disney menos Blancanieves, por sorte chegáronme tarde, xa sendo adolescente. Recordo, de feito, que as pelis Disney as vin todas gracias a que tiña un amigo en terceiro de BUP - 16 anos- que era un tolo de "La Bella y la Bestia", "Pocahontas", "Aladín", "La Sirenita"... A min parecíame un tipo súpersensible, claro, cun charme descomunal por facer gala desacomplexada da súa paixón animada. Él tiña toda a colección, e eu non tiña nada mellor que facer, por aquel entón.

Referíase unha colega hoxe especialmente á Sirenita, e eu, por primeira vez, púxenme a pensar en serio sobre eses debuxos, sobre ese conto. Así que fun á estantería a buscar o que considero unha pequena xoia da que se aprende moito, os Cuentos completos de Hans Chistian Andersen. Busquei La sirenita, e atopei un imaxinario peor do que recordaba. Tamén me pareceu curioso o final cristianizado. A Sirenita ten que matar ó príncipe (que finalmente se casa con outra) pra salvar a súa vida, pero non o fai, o que se considera unha boa acción que a deixa nunha especie de purgatorio durante trescentos anos, despóis dos cales, irá ó ceo.
Pero o máis brutal deste conto, e o que realmente me fixo pensar, é a transformación da sirenita en humana. Pra poder estar có príncipe, terá que cambiar a súa cola de peixe por pernas. Terá que adaptar o seu corpo ó corpo 'humano'. Terá que renunciar ás súas escamas por unhas pernas, e, claro!, polo que está enmedio. Terá que adaptarse para poder ensamblarse ó principe nunha hipotética sexualidade normativa. Así describe a bruxa o proceso:

"Antes de que salga el sol, nadarás hacia la costa, te sentarás en la orilla y beberás mi poción, y entonces la cola se te rajará y se irá apretando hasta formar lo que los humanos llaman unas piernas preciosas, pero dolerá como si te estuvieran atravesando con una afilada espada. Todos los que te vean dirán que eres la muchacha más bella que han visto. Conservarás tu andar ondulante, no habrá bailarina que pueda igualarte, pero cada paso que des, será como si pisaras un cuchillo afilado y sangrarás"

Podemos ver aquí unha menarquia dolorosa, ou unha adaptación á heteronormatividade que pasa por un sufrimento físico e psicolóxico insoportable.
Como sexa, a sirenita accede por amor ó príncipe, e a cambio, entrega a súa voz á bruxa como pago polo meigallo:

"- Pero si te quedas con mi voz- dijo la sirenita- ¿qué me quedará a mi?
 - Tu preciosa figura- dijo la bruja-, tu caminar ondulante y tus ojos expresivos; con ellos podrás fascinar a cualquier ser humano (...)
 - Así sea- dijo la sirenita..."

Este conto é certamente terrible, pero por sorte, e non sei si de casualidade ou non, eu cain de pequena noutro tipo de libros. Recordo Alí Babá y los cuarenta ladrones, Don tortuga el sabio, O árbol sabio - unha colección que tiña algúns títulos traducidos ó galego-, e a colección Victoria Plum. Estes dous últimos, os meus favoritos, e probablemente, agora que penso, responsables da miña inclinación polo ecofeminismo.

Victoria Plum era unha "nena flor" que vivía no monte con todos os animalitos, cós que se relacionaba e que a querían moito. Era moi doméstica, a Victoria Plum, si... bueno. Facía bufandas para o mapache, coido recordar, axudaba á rata de campo a cociñar un caldo... e cando se facía noite, os vagalumes a acompañaban a casa para iluminarlle o camiño... "xa que ti estiveches currando para todo o mundo, devolvémosche o favor". Con Victoria Plum aprendín que hai que ser boa veciña e amiga, que hai que saber dar e recibir, e posteriormente gracias ó feminismo puiden librarme da sobreexaltación das bondades do traballo doméstico e do coidado.

Penso que as fermosas historias cotidianas de Victoria Plum foron as que realmente se me quedaron dentro...

Cando tiña quince anos, canda a moda, precisamente, das princesas Disney, fixen un curso de fotografía no instituto. Collía a cámara e ía sacar fotos aburridísimas (que eu consideraba mui artísticas nese momento) ó lado da miña casa. Entón era todo monte. Nunha destas expedicións, estando eu moi concentrada nun encuadre ó lado dun río e duns campos desertos, escoitei claramente unha voz infantil ó lado miña que me espetou amigablemente un "Ola!". Mirei por todos lados. Alí non había ninguén.

Acórdome sempre moito deste episodio.  Xuro e perxuro que escoitei un "ola" nítido, claro, ata efusivo... e que non estou tola. Quén puido ser? Probablemete, agora penso, que Victoria Plum. Certo, quizáis non dende o chan, nin dende o río nin dende a herba. Pero era Victoria Plum, que estaba aí, que quedou aí, e que saudaba por dentro.

Ação PoÉ(Li)tica de espelhos II

Uma xícara de chocolate. Um filme. Lençóis limpos, cobertores. Sono profundo...
A vida não tem que ser sempre épica.

Hoje

Desacomplejadamente bonita por uma vez,
deu-me en componher minha figura inacabada,
sintonizar acordes perfeitos,
fazer son, caminho,
cantar un arpejo
imponente
moldado de cordas e maos.

Mercadona y el parto de las conejas

Si Mercadona quiere ser como la frutería de la esquina, por qué habremos de ir al Mercadona teniendo la frutería de la esquina en la esquina? Si Mercadona quiere ser como la pescadería de toda la vida, por qué habremos de ir al Mercadona teniendo ahí a mano la pescadería de toda la vida? Si Mercadona quiere volver a los orígenes, por qué quiere modificar genéticamente el pienso de las conejas para que paran como superconejas francesas? Al parecer Mercadona está llena de contradicciones existenciales. Si Mercadona quiere dejar de ser Mercadona, que se suicide. "Somos lo que hacemos" que decía Sarte. No cuela, Mercadona.

Inspirado en el artículo publicado en El País del domingo 27 de octubre : Mercadona vuelve a los orígenes y planta cara a la tienda de barrio

"Disculpe, busco el puesto del Mercadona..."

Anécdota felina

Hoy por la mañana había una caca en cada puerta de los respectivos cuartos de lxs animales humanxs de este piso. El mensaje estaba claro: "el estado de mi arena excede lo admisible"

Me pregunto si las cacas fueron visceralmente depositadas allí, primero una, y después la otra, o si por el contrario, las cacas fueron rodando por el pasillo empujadas vengativamente por una patita diligente.

A juzgar por el aspecto de la materia, yo me inclino más bien por lo segundo.

Estoy segura de que cuando me voy de casa, se prueba la ropa de mi armario...

"A Dios pongo por testigo, que jamás volverán a olvidar sacarme las cacas de la arena"

Feministas desde el Gulag

Se equivocó la paloma, se equivocaba,

por ir al Norte fue al Sur, 

creyó que el trigo era agua,

se equivocaba

(...)

Ella se durmió en la orilla, 

tú en la cumbre de una rama.

Rafael Alberti

Me equivoqué. Pensaba que un foro llamado "Marxismo(s)" podía ser también mi foro. Marxismo(S) con esa "ese" transigente, respetuosa, reflexiva y flexible al final.
Marxismos, qué bien!, de vez en cuando me llegará un poco de Gramci, un poco de Kollontai, un poco de Lenin, un poco de Althusser, un poco de Luxemburgo, un poco de Castoriadis, Federici... y cuál fue mi sorpresa que en lugar de todxs ellxs, me encontré un texto feminista (impecable, por cierto) de la Filósofa Frívola, seguido de una sarta de ataques absurdos desde el punto de vista de la teoría y praxis feministas, y, por supuesto, también insultantes.

El texto se introducía así:

"Al hilo del machismo-leninismo, me topo con esta perla. Una argumentación feminista respecto de la convocatoria de una manifestación sólo para mujeres. Leedlo con buen estómago. Igual la autora debería haber soplado después de escribir esto. Al menos, da juego "dialéctico", jejeje"

El texto es una reflexión muy acertada sobre la necesidad de crear espacios propios para las mujeres en los que avanzar autónomamente. Espacios que se resguarden de las inevitables dinámicas que operan en las relaciones sociales cuando un sujeto, "mujeres", pretende librarse en un momento dado de los automatismos propios de siglos de androcentrismo, y construír así un espacio propicio para generar un programa autónomo de lucha.

Aquí empieza normalmente la primera discusión: el "sujeto mujeres". Porque los hay (manda truco) que no reconocen el sujeto mujeres cuando hay millones de mujeres que se reconocen como "sujetas", así como hay otros millones que se reconocen como sujetxs-loquesea... 

Por esto, y después de enredarnos en este tipo de discusiones en la gran cantidad de espacios mixtos que existen en el seno de la lucha feminista, las mujeres, a veces, decidimos ir a nuestra bola y así poder avanzar pragmática y programáticamente a partir de un mínimo de consensos producto de experiencias comunes y compartidas. Y eso, parece que jode, porque como bien dice la Filósofa Frívola, supone toda una amenaza.

Este hecho, el de la autonomía, parece que ofende profundamente a algunos de los hombres de este foro "machismo(S)"... ay!, perdón!, "marxismo(S)";  tal y como denotan la mayoría de sus comentarios. Veamos algunos ejemplos de estas almas marxistas heridas que enviarían a muchas de nosotras al gulag a la primera de cambio:

"Si esto es lo que entiende esta señor por feminismo pues no, no soy feminista, ni quiero vamos (...) Claro que hay que empoderar a las mujeres, que obtengan espacios, darles protagonismo a ellas y sus luchas, pero la eterna tontería de tú no opines porque eres un hombre me parece absurda"

Acto seguido, alguien le responde que es un punto de vista paternalista, menos mal. El autor de la primera frase alega un lápsus argumentativo, porque son las 11:30 y tiene sueño. 

En el siguiente comentario que expongo, uno se confiesa troll. Aquí hay una novedad, un troll machirulo que se desenmascara. Eso sí, en un foro en el que está seguro de que no será penalizado por ello:

"Bueno, esto se puede leer por encima, por supuesto, que no da para más. Con algunas de las frases que reporta aquí el compañero basta. Y me parece incluso excesivo que se tilde de feminista, se queda en espiral de absurdo, complejos y sectarismo absurdo que parte de la bilis pura. Seguí a este personaje un tiempo en twitter, pero al final ni entretenía ya. El fenómeno troll vale para alguna risa o disgusto en las redes, pero nunca transformará la realidad"

Y aquí, uno que arenga contra el totalitarismo y el determinismo absoluto... pero, atención, lo hace "entre nosotras", es decir, en su tribu.

"eso es lo que defiende esta señora, el estatismo totalitario lo que defienden otros tantos, la metafísica barata de lo que hablan otros muchos y el determinismo absoluto como lo entienden muchos marxistas... Así es la vida, pero aquí, entre nosotras, esto es para descojonarse y punto"
NOTA: dice "nosotras", pero es un hombre, que no sé si se equivocó también por tener sueño o porque quizás piense que le redime el hecho de usar lenguaje no sexista.


Cuesta mucho entender cómo desde posiciones marxistas puede haber tan poco respeto a una lucha emancipatoria. Me pregunto qué pasó el día en que un blanco de clase media norteamericano entró en una reunión de lxs Black Panther diciendo eso de "hola hermanos!, aquí estoy y espero que me beseis el culo por ello". Dudo que el resto le diera la bienvenida.

Y dicho así, lo vemos claro. Qué difícil es verlo tan claro cuando se trata de mujeres. Será porque el feminismo es el movimiento más radicalmente transformador, emancipador y necesario. Amenaza y hace tambalear los mismísimos pilares de todas las certezas de la Historia. Por eso, porque molesta, porque cuestiona, porque "no se casa con nadie", porque insiste, irreverente, en señalar desigualdades y privilegios aún entre "amigxs", todas son (somos, fuimos, seremos) vapuleadas una y otra vez desde todos los flancos, incluído (y cómo duele!) el de la izquierda.

Desde Simone de Beauvoir hasta Beatriz Preciado, a todas se nos quiso encerrar en el gulag y callar para siempre...ni con un ejército de troles, caris!

NOTA: Si a alguna le va el sado, que se apunte a Machismo(s)... digo Marxismo(S)!
https://www.facebook.com/groups/128006714003669/?hc_location=stream

Machistas-leninistas "descojonándose, aquí entre nosotras"

La guerra de Chávez, el matriarcado y la Concha de Mariana Rondón...

Concha de Oro del Festival de San Sebastián a la mejor película de la venezolana Mariana Rondón, por "pelo malo". No hay que perderse la increíble entrevista que realiza El País con la directora. En su línea habitual, destaca en el titular su siguiente declaración: "Chávez nos sentenció a la guerra"

Me confieso contrariada. Por un lado, me alegra este reconocimiento a una directora en un festival como el de San Sebastián, ya que la discriminación hacia las mujeres que trabajan en el audiovisual de la que resulta la invisibilidad de su trabajo y de ellas mismas como profesionales, es muy sangrante como ellas denuncian. * **

Por otro lado, la entrevista de El País a Mariana Rondón me ha dejado un sabor mucho más agrio que dulce.  Confieso que en un primer momento la leí por puro morbo: - "A ver cómo justifica  el destacado titular de la noticia". Y qué sorpresa, me encontré con una frase aún más desconcertante: "En Latinoamérica reina el matriarcado, así que son las mujeres las culpables en mayor parte del machismo”. Desconcertante, por la afirmación alucinante de que en Latinoamérica reina el matriarcado...y yo con estos pelos. Desconcertante en segundo lugar porque, al parecer, según esta afirmación existiría una relación de causalidad abrumadoramente contradictoria entre el matriarcado reinante y el hecho "indiscutible" de que "las mujeres son en mayor parte culpables del machismo".

Me reconozco ingenua, por seguir proyectando a veces una imagen romántica de "nobles personas comprometidxs políticamente" en la "casta" del artisteo, cuando me parece que este compromiso se diluye cada vez más, y como mucho es pura retórica. Que alguien me corrija si me equivoco, pero por aquí, fuera de sus foro-espectáculo (y sus patéticas e insultantes pseudoarengas en los Goya después de salir en los anuncios de El Corte Inglés) la gente del espectáculo mainstream no está poniendo demasiado la jeta para defender derechos.

No tengo ya ninguna duda en cuestionar el titular (ya no tenía demasiadas dudas antes de leer toda la entrevista). Y a juzgar por las precipitadas lecturas de la realidad que parecen llevar a Rondón a conclusiones más que surrealistas, me quedan pocas dudas sobre la oportunidad aprovechada aquí para retorcer esa realidad, no sé si con intencionalidad (por parte de El País seguro que sí) o con la misma sorprendente mirada nublada que interpreta tanto matriarcados como guerras donde seguramente no los hay.

La verdad es que no sé muy bien qué pensar de toda esta ensalada: "Chávez nos sentenció a la guerra", "en Latinoamérica el matriarcado dominante genera machismo" y la Concha de Oro de Mariana Rondón...

Esperemos que la película tenga más sentido.

Fotograma de "Pelo malo"

* En el ámbito nacional, ver La situación de las mujeres y hombres en el audiovisual español, de la Universidad Complutense de Madrid para los años comprendidos  entre el 2000 y 2006 incluídos.
** En el ámbito internacional, "Organizaciones de mujeres del cine deciden una estrategia mundial para la igualdad en la Berlinale", 2013

De cómo hay mujeres que no aman a las mujeres y dan lecciones de amor

Noticia de El Mundo:
"Escuela de sexo oral busca sede en España"

Todxs sabemos que el sexo se aprende. Pero, atención, no se aprende en la cama como siempre habíamos creído algunxs ingenuamente. Se aprende en la academia.

El sexo también ha dejado de ser gratis. Ahora aprenderlo ya no es improvisarlo, ni adaptarlo, ni consensuarlo, ni performarlo a tu manera, ni (re)descubrirlo a tu gusto. Ahora te lo enseñan por un módico precio. Ser una Diosa y la atención de tu macho están garantizados por algo más de un puñado de dólares. Cuidado con equivocarse y poner mal la lengua Nueva Diosa Robótica!  para enseñar el código, la norma, el reglamento, estamos nosotras, las académicas del sexo.

Ahora está de moda la versión más burda del Emilio de Rousseau, que no por burda resulta menos retorcida y menos eficiente para poner a las mujeres en su sitio, que parece no ser otro que atender desde los márgenes al deseo y necesidades masculinas. Es "normal", porque es la norma. En una sociedad en la que el androcentrismo campa indiscutido y naturalizado a sus anchas, en la que la centralidad de los valores y necesidades masculinas continúa fabricando economías y formas de intercambio absurdas y cuestionables desde el punto de vista de la justicia y la dignidad, las mujeres y los hombres no seremos nunca libres, ni en lo más íntimo de nuestros deseos.

Me pregunto retóricamente por qué esta moda machistísima tiene tanta visibilidad e impunidad en los media. El tratamiento de la noticia - que es una elección del periodista- es casi doloroso de tan cínico de tan acrítico. Cuidado que volver atrás en derechos y en dignidad no parece de risa, y menos en este país que no es para mujeres. Dicen que quieren abrir "sucursales" de estas academias en España. Viva el mal viva el capital, que decía aquella sabia; por qué no abrir una academia cerca de Eurovegas como formación para las licenciadas en paro?

Aquí destaco algunas perlas que no tienen desperdicio. Algún día serán objeto de polémica, de objeción y de disputa. Hoy, no. Hoy estamos vergonzosamente demasiado lejos:

"les enseñan en diversas asignaturas cómo mantener a cualquier hombre contento, amarrado y adicto a ellas. Incluso "cómo despertar su bestia interior"

"Juntas aprenden a hacer mejores felaciones, a disfrutar ofreciendo sexo anal o a moverse mejor en la cama"

"está convencido de que españoles y rusos tienen muchas cosas en común a la hora de dejarse llevar por la pasión. "He tenido alumnas que estaban casadas con españoles y con italianos, fue un éxito para ellas... y claro, también para ellos", añade orgullosa antes de recordar que ha tenido incluso alguna estudiante llegada desde Japón sólo para aprender cómo ser una diosa en la cama"

"Estos meses han recibido la visita de empresarios del sexo radicados en California, que han quedado fascinados con la experiencia"


"Durante las clases de felaciones las alumnas fijan los penes de plástico en la pared de espejos para observarse a sí mismas mientras aprenden a arrodillarse con gracia y morbo"

"Lo que no hay en esta escuela del placer son cursos para hombres. Los únicos miembros del sexo masculino que se admiten son los falos de plástico empaquetados en bolsas transparentes que hay en cada mesa antes del inicio de la clase. "El hombre aquí no suele reconocer sus limitaciones"


"Tengo algunas alumnas que han hecho todos los cursos, en muchos casos sus maridos lo saben y están encantados, les piden que sigan estudiando"

Y lo que me parece más peligroso de toda la noticia:

'"Recordemos lo más importante: los hombres aman a través de los ojos", dice la decana a sus alumnas. Por eso "son necesarias muchas de estas técnicas de formación, destinadas no sólo a lograr el placer más exquisito sino también a crear un espectáculo inolvidable para nuestro amado". Saben que están rompiendo moldes en una sociedad como la rusa, que es gobernada ahora mismo por una ola de conservadurismo en el Parlamento, donde se ha llegado a plantear prohibir no sólo la propaganda gay, sino cualquier mención al sexo oral "o cualquier práctica no tradicional"'

No hay nada más infalible para mantener el orden atávico patriarcal que la confusión. Sólo así puede pasar por liberadora la peor de las opresiones disfrazada de revolucionaria. Confundir libertad sexual con evidente esclavismo sexual es tan perverso como funcional al orden contractual que se alimenta del trabajo gratis de las mujeres para perdurar. También, por supuesto, del trabajo sexual.

Flaco favor nos hacen estas mujeres a las mujeres.

Viajar sola

No necesitan esperar ni tres segundos, ni poner cara de misterio ni actitud de guardar para sí la llave del gran secreto. No. Con una determinación pasmosa, como si formase parte de un conocimiento intrínseco, innato, ancestral, forjado a base de cazar ciervos durante milenios, y mientras otrxs estamos aún decidiendo cómo colocar el mapa, te dicen: "por allí". "Por allí, por qué?". "No ves que por allí está el mar, por allá, Marruecos y por allá, América?".
Lo dicen con increíble precisión, normalizando lo que a mí me parece un envidiable iluminismo agustiniano.
Por eso me encanta viajar sola. Porque estxs, para su desgracia, no conocerán nunca la sensación de pánico y triunfo adrenalínicos que se experimenta cuando te pierdes, y vuelves a encontrarte.

El cuerpo de los ricos no es igual que el de los pobres

Esta es la cara de una persona que podría ser imputada por malversación, o lo que es lo mismo, se ve que lxs que pueden ser imputadxs por malversación, tienen estas caras. ¿A que parece que va a recibir un premio?.

Así es el cuerpo de lxs ricxs; alegre, risueño, mirando de frente y levantado, como esta cabeza de la foto, o el dedo de Bárcenas. Y el hombro, bajo la mirada, siempre… ¿nacen o se hacen en la escuela de la compostura para los impostores?

El cuerpo de lxs pobres es más bien como el de los dibujos de El Roto. Encorvado y lleno de sombras, aunque haya más dignidad en la uña del meñique de un desahuciado que en toda la cúpula que nos aniebla.

A mí también me gustaría tener la cabeza de Lagarde…

Lagarde, a su llegada a la Corte de Justicia, en París. / YOAN VALAT (EFE). Foto publicada en el El País 23/05/2013

Nihil novum sub sole para el feminismo

Antes de esta nueva moda española de acusar de nazi a cualquier movimiento social o cualquier forma de disidencia, ya había muchos supuestos progres bienpensantes y miembros de la Real Academia de la Lengua Española que desde siempre acusaban a las feministas de querer invadir Polonia y matar judíxs.

Cuando el señor Pérez Reverte, por ejemplo, se levanta con el machismo subido y utiliza ese término equivocada y despectivamente contra las feministas, no parece generar ni la mitad de polémica que si lo dice Cospedal, con todo el agravante que supone el hecho de que Cospedal ejerza un cargo político. Pero acaso un miembro de la RAE no debería cuidar especialmente la terminología que usa? no debería hablar con la propiedad que merece su sillón, desde el que se erige como defensor a ultranza del genérico masculino? Acaso ha trascendido la manera en la que este real académico calificaba la defensa del lenguaje no sexista como "intolerable matonismo casi indiscutido de las ultrarradicales feminazis" en twitter, o la no discriminación de género en ofertas laborales (estamos hablando del acceso al mercado laboral, nada menos) como una ocurrencia de una "pandilla de feminazis oportunistas, crecidas por el silencio de los borregos, la ignorancia nacional y la complicidad de una clase política prevaricadora y analfabeta" en su blog?. Así, sin ninguna vergüenza y sin ningún reproche fuera del feminismo, se desata su inmundicia académica y su ignorancia política.

Y ahora que lxs políticxs del PP acusan desacomplejadamente a los movimientos sociales de nazis, ahora que Telemadrid acusa al discurso nacionalista catalán de nazi, nos escandalizamos y nos echamos las manos a la cabeza con la perversión del lenguaje y la basura demagógica. Qué nos creíamos? Como sociedad, hemos sido benevolentes con ella y la hemos dejado pasar. Es más, muchxs (y muchxs muy de izquierdas) le han dado la máxima credibilidad por salir de la boca de un académico. Da igual si la boca es machista mientras pertenezca a un hombre sentado en la institución de la lengua española por excelencia. Da igual mientras esa boca se abra supuestamente en nombre de la "racionalidad" y el "sentido común" que ella misma se otorga.

Para bien y para mal, el feminismo camina siempre unos cuantos pasos por delante y por ello sabe que no hay nada nuevo bajo el sol.

De "parole de queer": "Cospedal dice que los escraches son NAZISMO PURO, y aquellos a los que se les cuestiona su lenguaje sexista o sus formas machistas que somos femiNAZIS. ¡Mismas formas de ataque por parte de aquellos que no están dispuestos a perder sus privilegios!"

Du haut jusqu'en bas_ Paris-Buenos Aires

Llegó un invierno extraño en la primavera... y al mundo otra vez le han dado la vuelta;
desde este cono sur inesperado improviso una hora leyendo a Cortázar.
Qué mejor que perderse con uno que ni en una rayuela se encontraba?
Me voy a la cama contigo,
hasta mañana.

O feminismo é

Levo días dándolle voltas ao tema das tetas de Amina; porque finalmente parece que non se trata de Amina, nin de mulleres, nin de igualdade, senón dunhas tetas que parecen ser o desencadeante dunha polémica non sobre tetas, nin sobre desnudos, nin sobre fatuas, nin sobre imanes, nin sequera sobre mulleres, senón sobre o feminismo. Vale.
Levo días pensando sobre as FEMEN, sobre Amina, sobre as súas accións, o impacto, o sentido; e tamén sobre a resposta por parte do chamado feminismo islámico, feminismo musulmán...
Levo días (bueno, anos) pensando sobre feminismo, e finalmente esta é a conclusión á que chego despóis de ler este bien-pensante-respetuoso-con todxs artigo
Penso que o feminismo é político, que non mediático. Que é público, que non publicidade, é necesariamente efectivo sempre, que non efectista. Porque o feminismo, non só como epistemoloxía, senón cando é, garda no seu berce a práctica da igualdade e da xustiza social
Unha vez en Camerún escoitei a un tecnócrata europeo (perfil moi whasp) relatar impresionado e admirado unha protesta de mulleres en Ghana contra non recordo qué política do goberno, na que se posicionaban en primeira liña, cós peitos espidos diante da policía antidisturbios. Iso paréceme efectivo, non efectista.
Pra ilustrar o caso contrario, se me ocurre o exemplo da famosa moza yogui desnuda do 15M. Iso paréceme efectista, e non efectivo.
Non recoñezo de todo os métodos de FEMEN, porque dubido da relación acción-impacto desexado (ou que eu desexo...), pero tampouco recoñezo de todo os argumentos de Red musulmanas, e moito menos conceptos tan contradictorios e tan paradóxicos que se len e escoitan en moitas ocasións, tales como "feminismo occidental" ou "etnocentrismo europeizante" . Coma se en Europa só houbera unha etnia. Como se existira unha tal etnia europea, como si utilizar este termo non signifique pensar unha entelequia, caer no mesmo equívoco, non fora confundir a hexemonía coas periferias e mestizaxes, profusas, dinámicas, e fecundas tamén en territorio europeo, caro que sí.

Propoño deixar de definir o feminismo polo que non é (colonizador, blanco, occidental, europeizante), e reclamar o que sí é: persoal, político, sempre revolucionario, e universal, e por tanto, exento de binomios e de polarizacións (que si o feminismo occidental hexemónico contra todo o resto). Non existen feminismos hexemónicos, senón hexemonias contra as que loitamos as feministas.
Se a igualdade e o respeto á diferenza son universales, o feminismo tamén o é.
--

Rajoy, de cara a la pared

La imagen que ilustra nuestros tiempos

Pido perdón

Pido perdón por ser chavista (ai, qué dixen!), pido perdón por recoñecerme pasionalmente no discurso do socialismo bolivariano. Pido perdón por non poder calibrar, por non poder argumentar complexo, con notas ao pé de páxina, con referencias aos postmodernos, aos postmarxistas, aos situacionistas, aos frívolos Andys Warhols.

Pido perdón por pensar a política irracionalmente, por tremer fronte a “Il quarto stato” na parede, fronte a unha bandeira republicana, fronte a Internacional có puño alzado... por pensar que a terra se divide entre ricxs e pobres, que uns acumulan e outrxs no, que uns son malos e outros bos. Pido perdón por dar crédito á miña nai cando me dicía “hai que xuntarse cós pobres!”. Pido perdón por ter uns pais que non sabían posicionarse políticamente máis alá da modernidade, que militaron toda a vida, que foron enganados dramáticamente polo grupo Prisa e por Europa.

Pido perdón por non escandalizarme có populismo, por non precisar ningún Laclau que mo explique. Pido perdón por sentir empatía cunha vella venezolana pegada a unha foto del Comandante que vin nun  periódico. Perdón por buscar bocas desdentadas e roupas humildes na xente que chora hoxe. Perdón por berrarlle á tele: “de quén son fillxs eses que preguntan insistentemente pola súa saúde?!” Perdón por pensar retorcidamente, por crer que estes e os de Miami están esperando un golpe, outro golpe, esta vez de sorte, que están esperando oir que Chavez morreu.

E Chavez morreu. 

Pido perdón por empatizar coa súa figura, por emocionarme có seu verbo, por desexar que a súa carne de revolución vivira por máis tempo... Perdón por namorarme. Como me namoro dun rapaz me namoro políticamente deste home - e non lle son capaz de ver os defectos- ainda que namorarse dunha revolución está prohibido, é raro, é tabú ilustrado, é, dicen, estar a un paso dun novo fascismo, é peligroso... logo pido perdón. Perdón, efectivamente, á Ilustración que separou os afectos cando separou os poderes, perdón a esa política higiénica europea, perdón ás corbatas de Bruxelas, ás editoriais supostamente ponderadas dos periódicos civilizados, aos Parlamentos de Occidente lavados con lexía, ao parquet brillante da bolsa neoyorkina…

Estou triste porque morreu Chávez, porque son internacionalista, porque teño medo do que esta morte pode significar para Venezuela, América Latina e máis aló...porque son unha romántica, que non inxenua, e porque eu tamén quero cambiar o reparto do mundo, roubar a Amancio Ortega e dárllelo axs desfiuzadxs. 

Pido perdón por estar triste hoxe (e enredarme neste post) e nin saber moi ben cómo decir por qué o estou.

O Changhai Estrés

Ao irse achegando ao huso horario de Portugal -gañándolle tempo ao día- vanse mudando de forma os campanarios, e enchéndose as nubes.
Palabra de migrante.
Chaca, chaca, chaca, chaca...

Desperta

Hai un pranto arriba. Ás tantas da mañá escoito os pasos cansos, resignados, apresurados por  tocarlle os rizos e dicir- "shhhhh, durme" – con esa voz especialmente calma que teñen as nais após os malos soños das nosas infancias. Volta a alisar a sábana, un bico de beizos quentes na frente quente, case non se nota. O olor de nai que apacigua uns segundos. Alivio profundo, alivio extraordinario, alivio que enche todo o longo e ancho da habitación...alivio curto, pois xa se víra cara o umbral. Alónxase o corpo brando que acolle case sen darse conta, con certa condescendencia, o amor infinito dos fillos. Dóelles ese amor infantil vulnerable -unha ofrenda íntegra- a un ser que se goberna libre, emancipado por ser adulto. Corpo que agora xa vai cara o outro mundo incomprensible -de conversas en voz moi baixa, de murmuios ás veces tenros, outras feroces...- deixando con sorte unha luz acesa (pero non sempre).
A nena permanece moi, moi quieta, de novo en agonía, - ten algo de vergonza-  un pouco resentida polo abandono patente. E entón, de novo,- cándo?- o soño.
 ... silencio...

Duos habet et bene pendentes

“Soy perseguida como un lobo entre el rebaño de corderos. No soy un lobo; soy la palabra, el espíritu y el poder”[1]

(Profetisa Maximilia S III d. C)

Cuando era niña creía en el Dios todopoderoso, en la inocua Virgen, en los santos y en las santas (lugar al que condescendientemente la Iglesia relegó a sus guerrerxs), en los ángeles, esa especie de jipis del paraíso, en el demonio claro (en mis círculos de socialización se decía demonio, no diablo) en el cielo, en el infierno… sabía que la concupiscencia, la lujuria, la voluptuosidad, lo libidinoso y la lascivia eran malísimos… y que quizás por eso nadie me los quería ni explicar.

Recuerdo que un día, a los once años, decidí racionalmente que ya no creía en Dios ni nada que lo acompañara. En cuanto empecé a tener conciencia política, se me fue la espiritualidad por arte de magia. El republicanismo, no sé si innato, no sé si genético, no sé si agazapado los domingos por la mañana de los catequesis a la espera de su oportunidad, sustituyó a toda la parafernalia católica y me hizo aborrecer todo su repertorio: los rezos, las imágenes piadosas, el dogma, el discurso… fue como cambiar de pandilla de amigxs… menos traumático incluso. Desde entonces, y hasta hace bien poco, siempre leí las religiones a través de parámetros, lo reconozco, excesivamente estrechos.

Sin embargo, en el alma creo. El alma existe. Lo sé porque me dolió un día de 2011 cuando vi por televisión la imagen de aquellas cuatro monjas en la Sagrada Familia limpiando afanosamente la mierda que el Papa se había dejado en su altar. Ahí comprobé, indignada por lo que veía,  que todo el dispositivo cultural del cristianismo no me había abandonado nunca. Al contrario, me sentía muy concernida por la humillación que me provocaban esas monjas devotas y la indiferencia de los curas, papa y obispos de alrededor.

La relativa suerte de haberme ausentado de la religión a los 11 años es el poder releerla ahora desde muchas ópticas diferentes.

El debate sobre el papel de las mujeres en la iglesia es antiguo. Tanto como el propio cristianismo. Una relectura feminista habla de unos orígenes muy igualitarios según los cuales, las prédicas de Jesús se enfrentaban al estatus inferior que las culturas griega, romana, hebrea, celta y germánica habían designado para las mujeres. Los libros del nuevo testamento que tratan de los años inmediatamente posteriores de la muerte de Jesús: Los Hechos de los Apóstoles y las Epístolas ofrecen ejemplos de mujeres que actúan como iguales dentro de la nueva fe. Entre los Gnósticos del Norte de África, por ejemplo, había mujeres sacerdotisas que dirigían oraciones y bautizaban. Se conocen escritos de los gnósticos hacia el siglo II dC en los que reforzaba el papel activo de las mujeres y afirmaban la naturaleza bisexual de Dios.  

Pues, yo soy el principio y el fin,

Soy la honrada y la escarnecida,

Soy la ramera y la santa,

Soy la esposa y la virgen,

La [madre] y la hija[2]

Sin embargo, también en el mismo Siglo II  ya andaba Orígenes, uno de los llamados Padres de la Iglesia, diciendo que el alma estaba dividida en dos partes; una masculina y otra femenina, de las que se derivaban cualidades masculinas y femeninas siendo las primeras superiores a las segundas. Entre estas dos originales interpretaciones comparadas (la de Orígenes y los Gnósticos) adivinen cuál trascendió y permaneció al paso de los siglos. Según esta regla de tres de Orígenes, la diferencia entre hombres y mujeres debería hacerse visible para resaltar los atributos de cada uno y el justo lugar en el que se deben situar machos y hembras. Así, en el mismo siglo, Clemente de Alejandría recomendaba  a las mujeres llevar velo y a los hombres barba, para recalcar la diferencia entre los sexos. Y para que la disparidad quedase bien clara, añadía que “la característica del hombre era la acción y la de la mujer, la pasividad”[3]

Con ánimo de llevar la contraria a Clemente, las imágenes más poderosas que se conservarían en los primeros siglos de fe cristiana fueron los retratos y las leyendas de las mujeres que se convertirían en mártires durante las persecuciones del Imperio Romano. Ellas serían heroínas y modelos de independencia y fortaleza para las generaciones futuras: Perpetua de Cartago relataba un sueño que tuvo en la cárcel, en donde amamantaba a su hijo,  antes de ser martirizada.

“Mis vestidos estaban desgarrados y de repente yo me convertía en un hombre… Mis ayudantes empezaron a frotarme con aceite, como suelen hacer antes del combate… Nos acercamos y dejamos volar nuestros puño. Mi adversario intentaba cogerme de los pies, pero yo le golpeé en la cara con el talón… Cayó de bruces con el rostro hacia el suelo y le pisé la cabeza… empecé a caminar triunfante hacia la puerta de la vida. Entonces me desperté”[4].

Pero aún a pesar de los siglos de martirio, de valentía, de independencia, las mujeres no pudimos hacer nada contra la interpretación interesada del mito de Eva que perduró hasta nuestros días. Tertuliano lo enuncia ya hacia el año 200 acusándonos a todas, des- singularizándonos y convirtiéndonos así en el magma homogéneo del pecado: “No sabéis que cada una de vosotras es Eva?”

El mito de Eva da pie a interpretar la “naturaleza femenina” a través de una contradicción muy simplista (es a la vez débil y a la vez perversa y poderosísima seductora) que en lugar de cuestionar los atributos asignados a las mujeres, los refuerza como nefastos, lo que justificará su exclusión de todos los puestos de responsabilidad y autoridad que en principio habían disfrutado. 

Se dice que una vez hubo una papisa (o una papa, o una mama, por qué no?) que desde muy joven se paseaba por Constantinopla, por Atenas, por Germania y finalmente por Roma a lo Bárbara Streisand en Yentl, vestida de hombre en medio de todos los eruditos. Tan lista era que, sin darse cuenta la hicieron papa, y así fue durante un tiempo, entre el 872 y el 882.  Un buen día se descubrió el percal, cuando dio a luz en público; no se sabe si sobre un caballo (a quién se le ocurre) o en un callejón entre el Coliseo y la Iglesia de San Clemente. Según una crónica de Jean de Mailly: Chronica Universalis Mettensis, fue “encadenada por el pie a la cola de un caballo, arrastrada y lapidada por el pueblo durante media legua”[5]

Me toca hacerme la pregunta obligada; y ahora que los papas vuelven a poder dimitir, ¿por qué no podemos volver a tener una papisa?

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[1] Citado en Fiorenza, en Ruether McLaughlin, eds., pp 41-42. En Bonnie S. Anderson y Judith P. Zinsser (2009). Historia de las mujeres. Una historia Propia. Crítica. Madrid. Pp (91-108)

[2] Citado en Elaine Pagels, The Gnostic Gospels, Nueva York, Random House, 1979. p. XVII. En Bonnie S. Anderson y Judith P. Zinsser (2009). Historia de las mujeres. Una historia Propia. Crítica. Madrid. Pp (91-108)

[3] Citado en Prusak en Ruether, ed., Religion and sexism, p 103. En Bonnie S. Anderson y Judith P. Zinsser (2009). Historia de las mujeres. Una historia Propia. Crítica. Madrid. Pp (91-108)

[4] Citado en Lefkowitz y Fant, p 266. En Bonnie S. Anderson y Judith P. Zinsser (2009). Historia de las mujeres. Una historia Propia. Crítica. Madrid. Pp (91-108)

[5] Fuente: Wikipedia: Papisa Juana: http://es.wikipedia.org/wiki/Papisa_Juana

Saldremos de rojo

En la página “El BOE nuestro do cada día” leía ayer una entrada que recogía la composición del nuevo Comité de Bioética de España, cuya renovación de sus doce miembros cada cuatro años se explicitaba en el BOE de ayer. Entre otras cosas, este órgano consultivo tendrá como atribución emitir un informe sobre la reforma de la Ley del aborto promovida por el ministro Gallardón. Según las pesquisas de El BOE nuestro de cada día, al menos 7 de los 12 miembros se han declarado antiabortistas y dos de ellos impulsaron el manifiesto contra la Ley del aborto socialista en 2009.

Otro clic buscando actualidad me lleva a una página de Le Monde: “Congelar sus ovocitos, la esperanza del reloj biológico”. Inmediatamente me rechina tanta maternidad obligatoria. Parece exagerado encontrar al primer pantallazo del día estas dos noticias consecutivas como primer impacto de actualidad. Según Le Monde, esta tecnología sería "une manière révolutionnaire de contrer les effets dramatiques du temps sur la fertilité des femme"  

Recordé entonces a Verena Stolcke, que teorizaba magistralmente sobre mi desazón, en su texto “El sexo de la biotecnología”: “las biotecnologías, impulsadas por el determinismo genético pueden tener graves consecuencias para las mujeres debido a las posibilidades que estas técnicas prometen para la procreación humana alentados por los intereses y deseos configurados por las relaciones de poder y género vigentes (…) aunque las nuevas tecnologías conceptivas y contraceptivas han brindado a las mujeres al menos en los países ricos mayor libertad para decidir sobre nuestros cuerpos, al mismo tiempo refuerzan la maternidad como responsabilidad y destino de las mujeres”

Un poco más tarde, y sin habérmelo propuesto, encuentro otra noticia para cerrar el círculo: "Una salida blanca y radiante de la crisis". Siempre mucho más folclórico y simplón, el cada vez menos periódico de referencia de la izquierda socialdemócrata, nos anima, en sus páginas culturales, a salir de la crisis de blanco, como si cubriéndonos de la gloria del divino sacramento pudiéramos las mujeres (objetualizadas, ya sin metáforas, como maniquíes) dar la vuelta a este loco mundo sin salir de las paredes de la domesticidad.

Señores; no saldremos de la crisis de blanco. Saldremos de rojo.

Otra vez, como tantas veces en la historia del capitalismo, nuestra sexualidad y libertad de deseo habrán de ser sacrificados y puestos al servicio del motor de la producción, que devolverá a los “male bread winners” a aquel estadio vital soportable anterior al desastre económico. Y todo ello gracias a nuestro aspecto de radiante ángel del hogar en los altares de la heteronormatividad biológica y social.

El discurso de la domesticidad se muestra ya sin ambages; y es que el esencialismo del mito del reloj biológico no parece un mal anticuerpo contra el supuesto sinsentido y apatía del desempleo. Ante las puertas de la realización cerradas a cal y canto, el destino biológico parece una salida más que digna.

Determinismo biológico, heteronormatividad obligatoria, deseo disciplinado, normalidad sexual, maternidad maximalista, naturalización de la feminidad, separación tradicional de roles y esferas… esto es lo que subyace en la actualidad hoy en día, en este mismo momento histórico.Nunca el biopoder había sido tan extravagantemente exhibicionista.

Pero muchas, (y somo muchas!), seguimos obstinadas en que con hijxs o sin ellxs, saldremos de rojo, y con libre elección.

Salir del armario con gafas de género- hombre

¿Por qué rechazar los acontecimientos? Tener mucho al mismo tiempo, sentir de varias maneras, reconocer la vida en diversas fuentes… ¿quién le puede impedir a alguien vivir ampliamente?

Clarice Lispector. Cerca del corazón salvaje.

En la cafetería del tren, de pie frente al ventanal viendo pasar el río con un libro y un café gozando de la euforia de ir viajando sola, una mirada masculina se sitúa justo detrás, a un metro de distancia, observando el paisaje a través (¿?) de la misma ventana.

¿Por qué la euforia se repliega?, ¿por qué mi centro de atención se desplaza al hombre como si fuera un imán?

-“Quizás esté observando realmente el río y las montañas”.

Sé que no.

Con los años he aprendido a pensar como una mujer, me he hecho una de ellas a base de aprender inseguridades que se desprenden de esas seguridades perversas (sé que sí, sé que no…)

En el momento en que la mirada masculina entra en escena, todo se vuelve pesadamente carnal. Mis circunstancias reducidas a mi cuerpo, no a mi yo. El sentido de mi existencia se desplaza y la vivo a través de un completo desconocido que además es un incordio.

No necesito compartir una sesión de terapia observándome el coño en un espejo y creer así descubrir mi mismidad y el hecho de ser mujer. Lo siento todos los días en los que alguien o algo me posiciona en la escala de valores del patriarcado a la que soy [conscientemente] rebelde.

Las mujeres llevamos a cuestas la existencia y no existencia de todxs, más que la nuestra propia. Esa roca sólo puede ser arrastrada en leeeeento avance cada x (¿?) tiempo, cuando raramente nos sentimos fuertes como para girarnos y sostener la mirada masculina que piensa, que pensaba, que seguirá pensando sin ni siquiera ser consciente de ello, quizás cuando ya me haya ido: - “Qué guapa, qué fea, qué gorda, qué flaca”- siempre con la razón de su parte, sólo sorprendiéndose un poco del raro desafío, pero aún sin inmutarse ni enrojecer de vergüenza. Como la existencia, la vergüenza también la vivimos nosotras de forma ajena.

Cierro los ojos y me repito: “soy un hombre, soy un hombre, soy un hombre…”  y ya no soy una mujer. Se produce una magia.Ya no siento anhelo de amor, ya no tengo que ser una madre ni una puta, ni una puta enfermera. Tampoco tengo que encontrar a nadie para cuidar a mi omnisciente no nato perdiendo en esa eterna búsqueda, en esa condena, el precioso tiempo de mis magníficas no realizaciones.

Pienso que soy un hombre y entonces somos sólo yo y mi existencia. Soy libre, libre… salgo volando… y soy todo amor, porque anhelo beber los vientos.